En uno de los más mortíferos naufragios recientes en el Mediterráneo, al menos 94 inmigrantes han muerto el jueves en la costa de Lampedusa, una isla al sur de Sicilia, cuando su barco se hundió después de que un incendio se iniciara a bordo. Más de 200 de las cerca de 500 personas a bordo del buque siguen desaparecidas, dijeron las autoridades.
Los cuerpos de los inmigrantes que se ahogaron después de que su barco se hundiera al cruzar desde África el jueves estaban alineados en el puerto de Lampedusa, Italia. Las víctimas eran en su mayoría procedentes de Eritrea, Ghana y Somalia, dijeron las autoridades italianas. Al menos dos niños se encontraban entre los muertos. Al menos 151 personas han sido rescatadas, dijeron las autoridades.
El viejo barco de madera al parecer salió de Misurata, Libia. En la madrugada, el barco se acercó a la orilla y los pasajeros encendieron una manta para señalar su presencia. Los pasajeros aterrorizados, se alejaron del fuego para evitar las llamas, y pusieron demasiado peso en un lado de la embarcación, que volcó, arrojando a muchos en el mar, dijeron funcionarios de la Guardia Costera. Poco después, el barco se vio envuelto en llamas y se hundió a sólo media milla de la costa.
La Guardia Costera fue alertada este jueves por marineros de la zona que vieron el barco de los inmigrantes en llamas. Seis barcos de la Guardia Costera y la policía, así como tres helicópteros, llevaron a cabo operaciones de búsqueda y rescate. El ministro de Infraestructura y Transporte, Maurizio Lupi, dijo en un comunicado que las operaciones de búsqueda continuaban y que se esperaban que el número de muertos aumentara.
El Papa Francisco, quien visitó Lampedusa en julio y rezó por los inmigrantes y refugiados, ha reaccionado rápidamente a la catástrofe, con un mensaje en Twitter diciendo: «Orad a Dios por las víctimas del naufragio en Lampedusa». En una audiencia este jueves, el Papa ha llamado a la pérdida de la vida de una «desgracia». «Oremos juntos a Dios por aquellos que perdieron su vida, los hombres, las mujeres y los niños, por los familiares y por todos los refugiados», dijo en italiano, según agencias de noticias italianas. «Unamos nuestros esfuerzos para que tragedias similares no vuelvan a ocurrir. Sólo una colaboración entre todos puede ayudar a detenerlos «.
El primer ministro Enrico Letta ha catalogado el hundimiento como «una inmensa tragedia» en un mensaje de Twitter. Según la Organización Internacional para las Migraciones, 25.000 personas han muerto en el Mediterráneo en los últimos 20 años, incluyendo 2.000 personas en 2011 y 1.700 personas el año pasado. En los primeros nueve meses de este año, 21.780 inmigrantes llegaron a las costas italianas, 4.000 de ellos niños, según las estadísticas publicadas por la organización Save the Children.
La mayoría de los menores no iban acompañados. «Italia y Europa no pueden ignorar un flujo tan constante de menores inmigrantes que llegan solos, sin adultos y cuidar de ellos», dijo en un comunicado Raffaella Milano, director de Save the Children Italia.
Lupi, ministro de Transporte en Italia, llamó a la lucha contra los traficantes de humanos como una «tarea que tenemos que asumir y que la comunidad internacional y la comunidad europea tiene que asumir también.»
António Guterres, jefe de la agencia de refugiados de las Naciones Unidas, elogió esfuerzos de la Guardia Costera italiana, pero expresó su preocupación por el fenómeno mundial creciente de inmigrantes que huyen de conflictos o persecuciones y mueren en el mar. En un comunicado, señaló que sólo el lunes 13 hombres se ahogaron frente a la costa sur de Italia, después de tratar de nadar hasta la orilla cuando el barco encalló.
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